BAGLIETTO como la lluvia en buenos aires Lyrics

Cuando las cartas salen malas
y van los dioses a lo suyo
cuando la luna es un anuncio de neón
cuando el silencio te acorrala
y te hipotecan el orgullo,
cuando el crepúsculo te pega un bofetón,
cuando las calles se amontonan
cuando los sueós se marchitan
cuando el teléfono se olvida de sonar
cuando las drogas decepcionan
cuando la sangre se encabrita
cuando los bares coleccionan soledad.

Y demasiadas pocas veces se merece
a vida una canción
y demasiadas madrugadas amanece
nublado el corazón
y demasiadas noches paso
durmiendo solo al raso
bajo el reloj de la puerta del sol
con un frio del demoño
preguntandole al otoño
quien le puso ese nombre de estación.

Cuando se afilan las navajas
cuando conspiran los espejos
cuando enloquecen las agujas del reloj
cuando se rompen las barajas
cuando los niños nacen viejos
cuando la carne sabe a carne de cañon
cuando los angeles flasfeman
cuando las cartas llegan tarde
cuando la aurora es una nueva decepción
cuando los besos envenenan
o cuando llueve en Buenos Aires
cuando se pone el sol en la imaginación

Y demasiadas pocas veces se merece ...

A D A
Cuando las cartas salen malas y van los dioses a lo suyo
D A
Cuando la luna es un anuncio de neón
A D F#m
Cuando el silencio te acorrala y te hipotecan el orgullo
E D A
Cuando el crepúsculo te pega un bofetón
E D F#m
Cuando las calles se amontonan, cuando los sueños se marchitan
G E
Cuando el teléfono se olvida de sonar
F C
Cuando las drogas decepcionan, cuando la sangre se encabrita
G F E
Cuando los bares coleccionan soledad.

A D A
Y demasiadas pocas veces se merece la vida una canción
A D E
Y demasiadas madrugadas amanece nublado el corazón
D C#°
Y demasiadas noches paso durmiendo solo al raso
G# C# D
Bajo el reloj de la puerta del sol con un frío del demonio
F#m F#m/F F#m7 F#m/D# D E
Preguntándole al otoño quien le puso ese nombre de estación.

Cuando se afilan las navajas, cuando conspiran los espejos
Cuando enloquecen las agujas del reloj,

cuando se rompen las barajas Cuando los niños nacen viejos,
cuando la carne suena a carne de cañón

Cuando los ángeles blasfeman, cuando las cartas llegan tarde
Cuando la aurora es una nueva decepción,

cuando los besos envenenan Cuando llueve en Buenos Aires
los que se ponen el sol de la imaginación

Y demasiadas... / Y demasiadas... / Con un beso del demonio..